miércoles, enero 24, 2007

SU AROMA...

El resplandor de su computadora le pega en la cara pero ella parece haberse acostumbrado lo suficiente como para notarlo, yo parada detras de su silla miro las hebras de cabello que se vuelven rojo intenso con la luz del monitor. Aspiro una vez mas ese olor que ya siento en todo el ambiente, ese olor que me excita, ese olor que me atrajo desde el principio sabiendo que provenia de ella. Ese olor dulzon, cargado de feromonas... olor a sexo.
Le pongo la mano en el cuello y ella sonrie, sigue haciendo calculos con su mano derecha y con la izquierda juguetea con su taza de cafe, termino de apartarle el cabello que tenia sobre la cara y me mira. Yo le doy las nuevas cifras y ellas las coteja en la maquina.
El golpeteo de las teclas de su pc se mezcla con el sonido de las leves aspiraciones que realizo, cada vez mas frecuentes, tratando de embriagarme con ese olor que empieza en serio a intoxicarme. Mi mente vuela y pienso en todas las cosas que ese olor me provoca hacerle.
La puerta de cristal se abre una y otra vez, me pongo nerviosa, pero luego me doy cuenta que es absurdo porque nadie puede leer mis pensamientos (aunque a veces sienta que me miran como si pudieran hacerlo). Terminamos de cuadrar las cuentas y yo me regreso a mi lugar con la ligera culpa en la conciencia de querer seguir aspirando ese olor que me atrae, me enloquece y me perturba. Ese olor que me hace desearla.
Miro mi monitor y continuo con mi trabajo, sigo sintiendo ese olor pero ahora se que no proviene de ella, proviene de otra parte mas cercana, proviene de mi.

Aspiro fuertemente y me guardo en los pulmones mi propio aroma...

domingo, enero 14, 2007

Una luz que timida comienza a esconderse y una voz oscura susurrando en mis oidos, un violin tan lastimoso como el camino que recorre hasta mis oidos. Yo aferrandome a todo lo que tengo y una sonrisa tratando de huir de mi rostro. Una mirada ausente en mis ojos, un horizonte que se pierde entre la hilera de casas, un olor a podrido en la nariz y la ultima comida indigesta en mi estomago. Un cable entre los dientes, sosteniendo el sonido como si no lo fuera a escuchar mas si lo soltara, mis manos moviendose tan rapido como pueden, el cabello cayendo por mi cara, revuelto, sin peinar. La piel erizada, sin saber si es por frio o por miedo. Un ojo rojo que me observa fijamente, las piernas adoloridas, los ojos cerrandose de sueño y las mandibulas entumidas de tanto presionar.

Y yo, yo toda entera en el limbo... pensando que esto es perfecto...

domingo, enero 07, 2007

ENTRE LATIDOS...


Voy con la mirada perdida en los cordones de mi mochila, a mi derecha un tipo no deja de hablar de lo cara ke es la vida en monterrey y de la inseguridad del centro del pais, a mi izquierda otro tipo lo escucha pacientemente a veces como keriendo interrumpir el monologo del otro. Yo voy mirando cada detalle de las personas a mi alrededor hasta que descubro a una pequeña nena que me mira mientras se apoya en las piernas de su mami. El autobus esta lleno y para cuando ese sonido empieza a retumbar en mis oidos una y otra vez yo no puedo hacer mas ke imaginar el fokito rojo encediendo una y otra vez iluminando la calcomania ke esta a su lado: "Si esta luz esta encendida, entonces se ha rebasado el limite max. de velocidad permitida de 95 km/h"
Empiezo a sentir la velocidad y me hundo en mi asiento, los dos tipos de mis costados siguen platicando. El autobus se mueve silenciosamente de un lado a otro, la carretera ya no se siente tan estable y de pronto todo se mueve, la nena se aferra su mami mientras esta sale disparada en el pasillo y logra detenerse con una mano, yo sujeto a la nena del brazo y el autobus empieza ainclinarse hacia un costado, solo oigo gritos timidos, gritos ke no terminan de salir de la boca, por un momento el autobus se detiene en dos llantas laterales y luego cae pesadamente sobre las 4.
Silencio... nadie dice nada, miro a la niña y le veo los ojos a punto de llorar, me averguenzo al ver ke todavia la sujeto con fuerza del brazo y me da miedo haberla rasguñado. Todos nos miramos la cara y nadie es capaz de saber ke pasa. Siento ese instante eterno, como el que hay entre un latido y otro en mi corazon, un latido ke me dice ke estoy viva seguido de un instante en el ke no sabre ke pasa hasta ke otro latido me diga ke lo sigo estando. el silencio se rompe: "maldito accord, casi nos saca de la carretera". Todo vuelve a la normalidad, los tipos platicando, la nena jugando con su mami, la gente platicando entre ella.
Llego a la ciudad, paso por el centro, llego a mi casa y me recuesto y sigo sintiendome en ese instante que se ha hecho eterno. Se que terminaré de escribir esto y me iré a dormir sintiendo que ese instante aun perdura, que aun no escucho el proximo latido de mi corazón.
Mañana tal ves pueda volver a sentirme viva, con un corazón que late...